Tranquilo, sonriente y sumamente positivo, así está el actual timonel de los florenses, Odir Jacques, quien no se estresa de más por la nueva final que sostendrá con sus pupilos frente a la Liga a partir del próximo martes.
Contrario al desgaste que puede generar una serie de ida y vuelta en la lucha por un título de campeón, en el camerino rojiamarillo parecen estar relajados pero no confiados pues se sienten fuertes para dar el golpe de una vez por todas.
Para el estratega del Team la experiencia en este tipo de series le dan la calma y parsimonia para manejar el trabajo del grupo de buena manera, Jacques es claro que en días de final se mantiene tranquilo y comparte mucho tiempo con sus mascotas.
“Siempre para las finales aparecen más periodistas, hay más llamadas telefónicas, pero yo sigo mi vida normal. Termino mi trabajo acá, luego hago los quehaceres de la casa, cuido de mi lora, limpio la jaula de los “periquitos” y si tengo que hacer un mandado lo hago. Ya el tiempo me ha dado experiencia porque si un entrenador está tenso o confundido, eso afecta los jugadores”, dijo el carioca.
Las finales perdidas por el conjunto de la Ciudad de las Flores en los últimos años de manera dramática, así como la suscitada en 1985 cuando él siendo técnico del Team alzó el campeonato nacional son para el entrenador cosas del pasado y simplemente parte de la historia.
“Yo creo que la otra final es pasado, han pasado 30 años, el próximo partido y la final siguiente es un tema aparte pero esa final (1985) fue un deber cumplido para mí como entrenador que fui campeón, realmente fuimos campeones en la cancha de Alajuela, teníamos un gran equipo y le ganamos a un gran rival”, agregó Odir.
Para Jacques, la baja de Óscar Esteban Granados es complicada por el buen nivel que venía mostrando el capitán de los heredianos, sin embargo es claro que tienen muchas alternativas en ese campo para realizar la variante.
El cambio de la final que se trasladó para el martes terminó siendo beneficioso según el estratega, esto para analizar quién será el sustituto del capitán rojiamarillo, así como para recuperar al equipo físicamente.
“El descanso es bueno para ambos, los dos equipos tuvimos desgaste pero el de nosotros fue más por el clima húmedo en Guápiles y el partido que fue intenso donde el equipo tuvo que defenderse y atacar, pero somos muy profesionales, tenemos mucho apoyo en la gerencia del equipo. Aquí no falta nada para recuperar jugadores. Estaremos bien para la final”, añadió el timonel.
De adjudicarse el certamen actual, Jacques sumaría su campeonato número 6 en el país con lo cual alcanzaría al técnico nacional, Marvin Rodríguez. Desde ya el brasileño adelantó que de ganar la copa le dedicaría el título a su “maestro”.
“Sería un gran orgullo, sería igualar al maestro pues fue él quien me trajo a Costa Rica y si tengo esa suerte, yo voy a dedicarle ese título a Marvin Rodríguez, yo lo quiero mucho, me enseñó algunas cosas que aún uso pues las aprendí del maestro, ojalá se dé para dedicárselo a él”, finalizó.
