La realidad país muestra que los ingresos monetarios han sido reducidos por la inflación que padece nuestra economía. Así también por limitaciones ante los créditos bien o mal asumidos dentro del seno familiar.
Esto lo veo reflejado en el consultorio con pacientes que están en tratamiento como en otros que recién inician un tratamiento psicoterapéutico y en algunas de las consultas telefónicas procedentes de diferentes niveles socioeconómicos.
En una de mis publicaciones anteriores en este medio sobre el tema referido a “finanzas personales” a modo de resumen recomendaba que se debían realizar pasos para reformular dichas condiciones y proponía incrementar los ingresos a través de nuevos activos. Estos nuevos activos eran pequeñas inversiones que generarán una leve ganancia y a partir de allí reinvertir para poder acrecentar dichos ingresos.
Algunos de mis pacientes seguidores de mis artículos me comentaban que su horario laboral no les otorgaba tiempo para realizar un nuevo proyecto debido a obligaciones con los hijos, etc.
Atenta a esto empecé a decirles que también se logra a través de trabajar sus “habilidades blandas” que permite conseguir trabajo, conseguir un nuevo empleo y/o lograr un ascenso laboral real y concreto.
Para comenzar, las personas tenemos una díada de amor-odio con esto; digo que tenemos bondad y cuando se nos cruzan los cables empezamos a malograr nuestros valores y se mezclan con otros que refieren al mal pensar del quehacer del otro. Es decir, de algún modo nos inundan los malos hábitos, entre ellos está la parte envidiosa, y comienzan a formarse malos sentimientos con el grupo de trabajo al que pertenecemos y las relaciones que se generen dentro.
Esto hace que podamos ser despedidos por nuestros comportamientos, sancionados por la conducta a lo interno del grupo laboral. Esto ha sido causa de no poder ascender en nuestros trabajos o que el empleador y sus jefes cercanos no nos consideren aptos para tal ascenso, no porque no seamos capaces, sino porque nuestro mal carácter supera nuestra buena labor.
Es decir, lo que escribimos con la mano lo borramos con nuestro codo, boicoteándonos en nuestros quehaceres. La personalidad también se manifiesta del mismo modo con nuestras familias, o sea, se traslapa para otros ámbitos de la vida y en el trabajo, el cual es fuente de sustento, por decirlo así, nuestro chimano, porque la personalidad es el porte que hacemos a nuestra labor.
Si usted es una persona impulsiva, de baja tolerancia hacia la escucha de la persona que le está hablando, sea compañero o un cliente, usted está mal invirtiendo en usted y necesita modificar esto.
Las personas consideran que ir a terapia es porque rompió con su pareja, sus hijos tienen dificultades en la escuela y esto mencionado tiene su lugar en el campo psicológico. Así también dentro del campo psicológico está desarrollar las “habilidades blandas” en el comportamiento laboral.
¿Cuáles habilidades blandas trabajo para crecer laboralmente?
Las más importantes son:
1. Gestión de conflictos
2. Gestión del tiempo
3. Manejo adecuado de situaciones de estrés
4. Adecuarse a la cultura de la empresa
5. Clara comunicación tanto oral como escrita
6. Buena gestión del trato al usuario de nuestras funciones asignadas por quien nos contrata
7. La productividad cualitativa principal para fortalecer la productividad cuantitativa que es la calidad de producto
8. Gestionar los cambios teniendo en cuenta la misión y visión de la empresa
En mi experiencia clínica son estas las principales para lograr conseguir trabajo y ascenso económicos reales y además verídicos.
Si usted considera que debe hacer un cambio que favorezca su tranquilidad y la de sus allegados, llámeme para realizar una cita y en conjunto lograremos los objetivos de fortalecer sus ganancias.
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Cómo mejorar la economía desde una perspectiva sana
