La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) está implementando el uso de contenedores refrigerados como morgues para mantener a los pacientes que mueran a causa de Covid-19.
Así lo manifestó este lunes Román Macaya, presidente de la institución, quien aseguró que en épocas de pandemia hay que prepararse para los peores escenarios, aunque espera que no se presenten.
La institución ha venido alistándose en caso de que el panorama sea trágico en el país, incluso, adquirió 3.000 bolsas para cadáveres. Actualmente, el Ministerio de Salud reporta seis decesos de pacientes a causa del coronavirus.
Las autoridades de salud le han pedido de manera constante a la población costarricense mantener activas las medidas sanitarias como el distanciamiento social, el lavado de manos, entre otras, para así evitar contagios masivos por el virus y evitar la saturación las áreas de salud y unidades de cuidados intensivos de los centros médicos.
“Hay hospitales que no tienen morgue, como el Cenare, y es natural que no exista porque este era un centro de rehabilitación, pero cuando se convirtió en centro de atención a pacientes Covid-19 lo dotamos con una morgue, que es un contenedor refrigerado, no se ha tenido que utilizar”, señaló Macaya.
El jerarca de la seguridad social tica explicó que en diferentes centros médicos se colocarán contenedores, tomando en consideración que muchas de dichas instalaciones carecen de morgue con la cual hacer un manejo eficiente de los cadáveres.
Recordó además que los contenedores tendrán a los cuerpos en periodos cortos, ya que en no más de 48 horas deben estar enterrados.
“Hay una estrategia de aumentar la capacidad en las morgues, esto puede ser rápido, aunque no ha sido necesario su uso, los fallecimientos se han podido atender con las existentes”.
SINDICATOS APOYAN
Consultados sobre el accionar de la CCSS, en la Unión Nacional de Empleados de la Caja y Seguridad Social (Undeca) y el Sindicato Nacional de Médicos Especialistas (Siname) manifestaron estar de acuerdo.
Según indicó Martha Rodríguez, secretaria general adjunta de Undeca y Mario Quesada, presidente del Siname, es una medida preventiva al decir que los cadáveres con Covid-19 no deben estar cerca de otros que murieron a causa de otras patologías.
“En realidad las unidades de patología de los hospitales no están preparadas para atender eventualmente una crisis como la que podría darse”, apuntó Rodríguez.
“Creo que el actuar es pensando en los panoramas, me parece lo correcto, Macaya no es médico, pero tiene un buen grupo de asesores, el problema no es solo dónde poner a los enfermos, sino prepararse también para los decesos”, añadió Quesada.
En conferencia de prensa de este lunes, Macaya dijo que en total son 133 funcionarios contagiados con el virus.
De ese total, el 34% se contagió al tener contacto con otro funcionario de salud, el 28,5% están en estudio, al 15% se le desconoce el lugar o condiciones de contagio, el 12% tuvo contacto directo con pacientes infectados y el 10,5% se infectó durante un viaje al exterior.
PERIODISTA: Sergio Jiménez
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Martes 21 Abril, 2020
HORA: 12:00 AM
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