El Violín Tsunami visitará Costa Rica. Se trata de un instrumento más que especial, pues busca recordar a las víctimas del fenómeno que azotó Japón en 2011.
Tiene un origen muy peculiar, porque lo fabricaron con los restos de la madera que dejó el tsunami ocasionado por el Gran Terremoto del Este.
Después del sismo y posterior tsunami, en muchas regiones afectadas se acumularon bastantes restos de madera, los cuales provenían de árboles nativos de dicha región.
Antes de que sucediera el evento, estos árboles se utilizaban como postes y vigas en las casas, y por muchos años convivieron con los ciudadanos.
Dichos restos de madera los transformaron en un violín, para que, a través del sonido, se evoquen los recuerdos del este de Japón, en memoria de las personas que fallecieron en este terremoto y por el deseo de la renovación de las regiones afectadas.
En el violín se dibujó un árbol de pino, el cual sobrevivió milagrosamente ante este desastre, con el deseo de externar la pronta reconstrucción de las regiones afectadas.
DEVASTADOR
Este desastre natural se produjo por un terremoto de magnitud 9,0 grados que creó olas de maremoto de hasta 40,5 metros.
El terremoto ocurrió a las 2:46:23 p.m. hora local del viernes 11 de marzo de 2011. El epicentro se ubicó en el mar, frente a la costa de Honshu, 130 km al este de Sendai, en la prefectura de Miyagi, Japón, a una profundidad de 32 kilómetros.
Duró aproximadamente seis minutos según los sismólogos, incluso se indicó que el movimiento ocurrió a causa de un desplazamiento en proximidades de la zona de la interfase entre placas de subducción entre la placa del Pacífico y la placa Norteamericana.
En la latitud donde ocurrió este terremoto, la placa del Pacífico se desplaza en dirección oeste con respecto a la placa Norteamericana, a una velocidad de 83 mm/año. La placa del Pacífico se mete debajo de Japón en la fosa de Japón, y se hunde en dirección oeste debajo de Asia.
Es el terremoto más potente sufrido en Japón hasta la fecha, así como el cuarto más potente del mundo de todos los terremotos medidos hasta hoy. Desde 1973 la zona de subducción de la fosa de Japón ha experimentado nueve eventos sísmicos de magnitud 7 o superior. El mayor fue un terremoto ocurrido en diciembre de 1994 que tuvo una magnitud de 7,8, con epicentro a unos 260 km al norte del terremoto del 11 de marzo de 2011, el cual causó 3 muertos y unos 300 heridos.
Horas después del terremoto y su posterior tsunami, el volcán Karangetang, en las Islas Célebes (Indonesia), entró en erupción.
La NASA, con ayuda de imágenes satelitales, comprobó que el movimiento telúrico pudo haber desplazado la Isla de Honshu aproximadamente 2,4 metros al este, y alteró el eje terrestre en aproximadamente 10 centímetros.
La violencia del terremoto acortó la duración de los días en 1,8 microsegundos, según estudios realizados por laboratorios de la NASA.
Aunque pase mucho tiempo, se espera que, sin perder el temor ante la naturaleza ni olvidar el terremoto del Este de Japón, en los lugares donde suene el Violín Tsunami, se reúnan personas para fortalecer los lazos de las familias y las regiones.
MUERTES
La Agencia de Policía Nacional japonesa confirmó 15.893 muertes, 2.556 personas desaparecidas y 6.152 heridos a lo largo de 18 prefecturas de Japón.
El análisis de los 13.135 cuerpos recuperados para el 11 de abril de 2011 reveló que 92,5 % de los fallecidos murió por ahogamiento. Las víctimas mayores de 60 años fueron las más afectadas.
Save the Children informó que alrededor de 100 mil niños quedaron desarraigados de sus casas y a muchos los separó de sus familias porque el terremoto ocurrió en horario escolar.
En total, 236 niños terminaron huérfanos por el desastre, el terremoto y tsunami mató a 378 estudiantes primarios y secundarios, y dejó otros 158 desaparecidos. Una escuela primaria en Ishinomaki, prefectura de Miyagi, la primaria de Okawa, perdió a 74 de sus 108 estudiantes y a 10 de 13 maestros y empleados.
El Ministerio de Exterior japonés confirmó la muerte de 19 extranjeros, de nacionalidad estadounidense, canadiense, china, nor y surcoreana, paquistaní y filipina.
Para las 9:30 UTC del 11 de marzo, Google Person Finder, usado también en los terremotos de Haití, Chile, y Christchurch, Nueva Zelanda, recopiló información de los supervivientes y su localización.
Los funerales japoneses son normalmente elaborados en ceremonias budistas y en ellos se realiza una cremación. Los miles de cuerpos excedieron la capacidad disponible de crematorios y morgues, muchas de ellas fueron dañadas, lo que ocasionó problemas para ejecutar tantas honras fúnebres.
Un solo crematorio en Higashimatsushima, prefectura de Miyagi, por ejemplo, pudo realizar funerales para 4 cuerpos por día, a pesar de ser requeridos muchos más.
El tsunami causó muchas muertes fuera de Japón. Una persona falleció en Jayapura, Papúa, en Indonesia luego de que la atrapara una ola.
Un hombre que dijo que quería fotografiar la llegada del tsunami en la desembocadura del río Río Klamath, en el sur de Crescent City, California, fue tragado por el mar. Su cuerpo lo hallaron hasta el 2 de abril, 530 km al norte en la costa oceánica.
CONCIERTOS
Este proyecto del Violín Tsunami tiene como objetivo ejecutar 1.000 conciertos con la colaboración de los violinistas del mundo, y en Costa Rica se realiza por primera vez una presentación.
El jueves 15 de marzo de 2018, se llevará a cabo el espectáculo, en el marco de la Semana Cultural del Japón, un concierto de violín llamado Violín de Tsunami, a las 7:00 p.m. en el Teatro Auditorio Nacional.
En la actividad, participarán el violinista japonés Ray Iwazumi, el violinista costarricense José Aurelio Castillo, la Orquesta Sinfónica Juvenil Intermedia de Costa Rica y el pianista japonés Toshiki Usui.
La entrada a este concierto es gratuita, pero el cupo limitado.
