Durante el 2017, un total de 52.000 costarricenses reprobaron la prueba práctica de manejo para obtener la licencia de conducir, de estos se estima que 13.000 la fallaron por no pasar la prueba de los conos.
Dicha cifra equivale al 25% de todos los aspirantes que no aprobaron el proceso de acreditación el año anterior, según datos proporcionados por la Dirección General de Educación Vial a DIARIO EXTRA.
Desde esta dependencia del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) fueron claros en que este es el rubro en que más veces fallan los evaluados, tanto en automóviles como en motocicletas.
Hechos como el derribar, rozar o incluso majar la base de alguno de los conos durante la prueba práctica de manejo equivalen a perder automáticamente 32 puntos de la prueba según explicó Hugo Jiménez, director de Educación Vial.
“Con una sólo falta tipo I, el interesado pierde la prueba y tenemos la constante con los conos, la cual es la parte de la prueba que valora la maniobrabilidad de los futuros conductores”, explicó.
“En el caso de las pruebas para carros, la distancia entre los conos es de 8 metros y en el caso de las motocicletas es de entre 4 y 5 metros dependiendo del cilindraje”, agregó Jiménez.
También, entre los motociclistas el poner el pie en el suelo durante el recorrido en zigzag o el conducir la motocicleta fuera de las líneas paralelas, son parte de los problemas más comunes.
Direccionales son un dolor de cabeza
Otro aspecto que Jiménez recalcó fue que la segunda falta en la que incurrieron mayor cantidad de evaluados el año pasado es el no uso de las luces direccionales con un 23%, esta falta es tipo II y descuenta 16 puntos de la prueba.
Además, la tercera falta en que más incurrieron los usuarios fue el no acatar las indicaciones del evaluador, esta falta es tipo IV y únicamente resta 4 puntos, pero de igual manera un 21% la incumplieron.
“Por una falta tipo II, III, IV, el interesado no pierde la prueba, sin embargo, son errores que van restando puntos, desde el 2014 se aplica un reglamento para calificar estas pruebas”, aclaró el director de Educación Vial.
Detener el vehículo en la prueba de reverso, irrespetar una señal de tránsito, desconocer cómo se hace el cambio de luz, son otras de las faltas más comunes que cometieron los usuarios el año pasado.
La lista de los elementos a evaluar, que el MOPT pone a disposición de las personas, permite conocer los aspectos que se califican y el valor de cada uno, por lo que se insiste en que todos los aspirantes deben consultarla.
