Un piedrero se comió las hostias que se guardaban en un cáliz, el cual dejó botado en la calle; este fue hallado por una vecina que lo llevó hasta la delegación de la Fuerza Pública de Paraíso. Se trata de una copa metálica, con una tapa que termina en cruz, posiblemente utilizada en algún templo católico, que el drogadicto sacó.
Al sospechoso lo localizaron durante patrullajes que la policía mantiene de forma constante en las calles.
Este cáliz tenía las hostias consagradas por lo que un sacerdote dio aviso al obispo, quien deberá realizar un acto en el templo para colocar otro.
Monseñor Francisco Ulloa, obispo de Cartago, manifestó a DIARIO EXTRA que el ritual se hace cuando sustraen alguna imagen donde se cierran las puertas y se hacen oraciones, sin embargo, en este caso le parece extraño que el cáliz aparezca en la calle.
ÚLTIMO CASO
El hampa visitó el templo y se llevó equipo de amplificación de sonido y dos micrófonos, luego de que los vecinos se dieron cuenta cuando llegaron a una reunión de feligreses en la comunidad de Sandillal de Cañas.
Hilda López, catequista, comentó a DIARIO EXTRA lo ocurrido y aseguró que no es la primera vez que los delincuentes roban en ese templo.
“Notamos algo extraño dentro del templo, visitaron la bodega donde dimos cuenta que los maleantes habían ingresado por uno de los portones de rejas que palanquearon forzándola para ingresar. Denunciamos en el OIJ de Cañas y esperamos dar con los responsables, ya que no es la primera vez que esto ocurre”, manifestó.
López agregó que después de la misa se reunieron para organizar unos eventos y fue cuando se encontraron con el robo.
POLICÍA ALARMADA
Michael Soto, jefe de la Oficina de Planes y Operaciones del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), manifestó que se registran 67 robos a templos, por lo que en promedio se dan 10 atracos por mes.
Alajuela encabeza la lista con 15, seguido de San José y Puntarenas con 12, por lo cual las autoridades se manifiestan preocupadas ante el incremento de esos delitos, en los cuales la mayoría de los sospechosos son adictos.
Los amigos de lo ajeno aprovechan que muchas iglesias no tienen guarda, ni dispositivos de seguridad como cámaras. La mayoría de los templos cuenta con sistemas de sonidos, computadoras y otros objetos valiosos. Las alcancías permanecen ahí y en algunos casos llenas, por lo cual la tentación es mayor.
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CRÉDITOS: Fotos: Edis Gómez, corresponsal y MSP
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Miércoles 24 Agosto, 2016
HORA: 12:00 AM
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