Durante el primer semestre de 2015, los ingresos de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) registraron una disminución de ¢288.483 millones respecto al mismo periodo de 2014.
Esta baja en los ingresos se debe a que el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) redujo este año de manera sustancial las compras de búnker y diésel para la producción eléctrica, mediante la generación térmica, para las plantas de Garabito y Moín, a raíz de las lluvias, en especial en el Caribe, que aumentaron el caudal de los ríos y por ende de las plantas hidroeléctricas.
Semanas atrás el ICE informó que entre enero y junio de 2015 el 98% de la producción de electricidad se obtuvo por medio de energías limpias.
Socorro Carranza, directora de Ventas del Recope, dijo que durante los primeros seis de 2014 los ingresos totales de Recope fueron de ¢918.060 millones, mientras que en el mismo periodo de 2015 llegan a ¢629.577 millones, lo que se traduce en pérdidas económicas por ¢288.483 millones.
La funcionaria detalló que en lo que respecta a la demanda del resto de combustibles, en especial las gasolinas, diésel y gas de cocina, registran un alza en el consumo este año con respecto a 2014, por lo que enfatizó que la reducción solo se da en el combustible adquirido por el ICE.
Al respecto dijo que el año anterior el ICE invirtió ¢118.616 millones en la compra de combustibles y para este año, hasta junio, las compras ascendieron a ¢3.944 millones, es decir ¢114.672 millones menos que lo registrado en 2014.
“Si se excluye al ICE, la demanda nacional no ha decrecido. El efecto que tenemos es que el agua es un recurso gratis con el cual la generación de electricidad resulta más barata para el país que con hidrocarburos.
Las condiciones climáticas desde el año pasado y la energía eólica han favorecido para que ICE baje la demanda este año a un solo cargamento de búnker bajo en azufre, pues ya mandaron decir que los otros dos, tras proyecciones de ellos, no los van a necesitar este año”, explicó Carranza.
DE MILLONES A MILES
Agregó que el hecho que el ICE baje la demanda de combustibles para la generación de energía por un lado es una buena noticia, pero desde el punto de vista de ingreso de Recope no tanto.
Detalló que “el 2014 fue un año intensivo en ventas, pues para esa fecha el ICE ya había adquirido 1.641.569 barriles tanto de búnker como de diésel, pero si nos vamos a este año lo que lleva son apenas 97.355 barriles, lo que representa una baja en un 94%”.
Es decir, durante el primer semestre del presente año el ICE compró 1,5 millones de barriles menos que en el mismo periodo de 2014.
La demanda total sumó 1.693 millones de litros en el primer semestre de 2014, en la que se incluye el consumo del ICE, así como del resto de los combustibles comercializados por Recope.
Para 2015 la situación cambió, pues en el primer semestre la demanda nacional fue de 1.511 millones de litros, para una reducción con respecto al año anterior de 182,5 millones.
Apuntó que pese a esta situación las estaciones de servicio, gasolineras y transportistas, entre otros sectores, no se vieron afectados porque más bien la demanda del resto de los combustibles se incrementó un 4%, con lo que se mantiene el dinamismo en la economía.
Reconoció que de tomarse en cuenta la reducción del ICE, se traduce en una rebaja del 10,78% en el consumo nacional.
“En el caso del ICE si lo vemos desde un enfoque país, el que no genere térmico deberíamos verlo como algo bueno, aunque a nivel de Recope sí genera un impacto, pasar de 1,6 millones de barriles en el semestre a 97 mil barriles por supuesto se siente”, aseguró.
Para 2016 Carranza acotó que el panorama será parecido al actual, pues el ICE proyecta que tendrá una baja en las compras de combustibles.
PERIODISTA: Krissia Morris Gray
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Miércoles 05 Agosto, 2015
HORA: 12:00 AM
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