Constantes quejas por cilindros en mal estado y sin sellar, y la sombra del accidente que provocó al muerte de cinco personas por la explosión de gas en una soda en Alajuela, en 2013, han sido insuficientes para que se logre establecer un sistema de regulación al gas licuado de petróleo (GLP) o gas de cocina.
Desde hace cinco años hace fila en la Asamblea Legislativa un proyecto de ley para regular el mercado del GLP, conocido popularmente como gas de cocina.
La iniciativa, que se tramita bajo el expediente 18.198, fue presentada por la organización Consumidores de Costa Rica, que pretende mejorar las condiciones de seguridad y que el consumidor pueda llenar su cilindro en cualquier lugar, indistintamente de la empresa o el supermercado, lo que define como el llenado universal.
EXPLOSIONES
El diputado cristiano Gonzalo Ramírez presentó esta semana el proyecto 19.637, que persigue el mismo propósito.
Según el legislador, la universalidad del llenado evita exponerse a problemas de desabasto, como sucedió recientemente con el conflicto familiar de la empresa Gas Nacional Zeta.
En temas de seguridad obliga a la inspección periódica de los distribuidores y envasadores.
“El mantenimiento de las válvulas de los cilindros, las mangueras y las tuberías son los principales causantes de accidentes provocados por el uso de gas en hogares y comercios. Queremos ser más estrictos y exigir normas de seguridad claras y obligatorias para todas”, señaló el diputado.
Erick Ulate, presidente de Consumidores de Costa Rica, urgió a los diputados para que prioricen el proyecto que presentaron, que a su criterio tiene una regulación más integral y ha avanzado en la Comisión de Asuntos Económicos en el Congreso.
Esta iniciativa obliga a que los cilindros no tengan más de 10 años en el mercado. Según Consumidores, actualmente circulan unos con más de 40 años, y lo que hacen es pintarlos.
También exige cambiar la válvula de prensa por una de rosca, obliga a establecer una instalación de GLP en el comercio o vivienda y a formar técnicos en este gas.
Prohíbe la venta de gas en casas. De acuerdo con dicha organización, las familias desconocen por ejemplo que el gas debe estar fuera de la casa, a una distancia mínima de 3 metros de la cocina.
El Ministerio de Ambiente y Energía trabaja en un reglamento. Según Ulate, esta reglamentación no resolvería nada porque mantiene la concentración del mercado, imponiendo el llenado de cilindros por marca.
DIARIO EXTRA consultó a esa cartera cuándo estaría listo el reglamento y qué contemplaría, pero al cierre de edición no recibimos respuesta.
