21 personas serán testigos en un juicio que inicia hoy contra tres personas de apellidos Montero, Jiménez y Miranda, acusadas de coordinar y ejecutar un secuestro contra tres ingenieros ticos en Panamá durante agosto del 2013.
Según la investigación, los imputados se habrían encargado de coordinar, en tierras canaleras, con tres personas de apellidos Smith, Brown y Carrington, quienes son procesados en ese país.
HACE 2 AÑOS
El hecho se remonta al 25 de agosto del 2013, cuando los tres costarricenses salieron de trabajar en la provincia de Colón, Bahía Las Minas, en Cativa.
Eran pasadas las 4 p.m. y ellos iban en el mismo carro y cuando habían recorrido al menos un kilómetro, al parecer, fueron interceptados por unos hombres vestidos de policías, quienes los encañonaron, se acercaron al carro y los habrían sacado.
Los apuntaron con el arma de fuego, los obligaron a entrar al auto en el que viajaban ellos, en la parte trasera, y los llevaron hasta el sector de Cocosolito en Colón.
¢45 MILLONES
Luego de llegar al lugar donde los mantendrían secuestrados, indicaron las víctimas, un hombre les habría exigido el pago de $90 mil, unos ¢45 millones, por su liberación. De no cumplir con la entrega del dinero, los matarían.
Se presume que los imputados que se encontraban en Panamá establecieron contacto con los acusados que estaban en nuestro país con el fin de coordinar cómo y dónde recibirían la plata por el rescate.
Un día después, el 26 de agosto, dos de los hombres que estaban en suelo canalero habrían trasladado a dos de los secuestrados hacia el corregimiento de Cristóbal, donde los dejaron en libertad y les indicaron que debían interceder para el desembolso de $50 mil, alrededor de ¢25 millones, a cambio de la liberación del tercer ofendido, a quien al parecer mantenían capturado y dejaron clara la orden de que no debían comunicarse con las autoridades.
EL PAGO
Ese mismo día se hizo un pago en las cercanías de un supermercado en Tibás. Uno de los imputados habría recogido el paquete y se trasladó a la casa de una de las mujeres que, presuntamente, formaban parte del grupo de delincuentes.
Una vez con el dinero en mano, liberaron a la persona que tenían retenida en Panamá. DETENCIONES
Horas más tarde, agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) detuvieron a Montero y Jiménez en Bario México, mientras a la mujer de apellido Miranda la aprehendieron en su vivienda ubicada en Tibás
Un amigo de las víctimas fue quien alertó a las autoridades de lo que ocurría con las víctimas. Se enteró del caso tras recibir una llamada telefónica de uno de sus socios, quien estaba secuestrado.
El 6 de setiembre del 2014, el OIJ con colaboración de oficiales de la Unidad Especial de Intervención y del Ministerio de la Presidencia detuvieron a un jamaiquino de 35 años en Alajuela, quien figura como sospechoso de formar parte de una banda que habría raptado a ciudadanos costarricenses en el vecino país del sur.
Las investigaciones apuntan como principal sospechoso de formar parte de ese grupo que organizó el secuestro al jamaiquino, a quien se le decomisó una computadora, documentación varía, así como un arma de fuego tipo pistola calibre .45.
