En menos de 72 horas Herediano y Santos se ven las caras nuevamente en el mismo escenario, el Rosabal Cordero. Solo que para este enfrentamiento el margen de maniobra se reduce al estar en juego el boleto a la final.
Florenses y santistas disputan el primer round de las semifinales, los primeros 90 minutos para acomodar la serie a favor.
En el banquillo santista aparece César Eduardo Méndez, quien tiene sangre en el ojo porque el Herediano lo echó el torneo pasado sin justificación alguna. Y ahora amenaza con eliminar al cuadro rojiamarillo del torneo.
El Team como equipo local es el obligado a proponer. Seguramente será un duelo muy similar al que protagonizaron el miércoles en el cierre de la fase regular: con un cuadro rojiamarillo volcado al ataque y un equipo rojiblanco un tanto conservador, con un aparato defensivo bien posicionado.
Santos le sacó un empate tres días atrás al conjunto herediano, lo que le valió dejarse el subliderato y la ventaja deportiva. Si bien los guapileños sostienen que no se confían de la ventaja, es un seguro que pueden sacar al final en caso de empate en puntos y goles. Además, ese “respaldo” le permite al D.T. Méndez no arriesgar tanto, sobre todo hoy en condición de visita.
El partido anterior paró una línea de 5 que no se resquebrajó en ningún tramo del partido, con dos marcadores para darle soporte a la zaga, aparato con el que neutralizó la ofensiva rojiamarilla. Santos, además, puso dos hombres abiertos para buscar el contragolpe y un centro delantero para inquietar a los centrales.
Para esta oportunidad Méndez podrá contar con el goleador Kenneth Dixon, quien se perdió el cotejo anterior por una sobrecarga muscular. En contra Odir Jaques no se saldrá del esquema ultraofensivo al que acostumbra. Más bien medita hacer un par de cambios en ataque. Cristian Lagos podría ser titular acompañando a Jonathan Hansen para tener más ocupados a los defensores santistas.
Herediano tiene la baja de su goleador Yendrick Ruiz, pero podría contar con el volante Esteban Ramírez.
Los rojiamarillos entrenaron ayer por la mañana y se concentraron en el hotel Corobicí. Mientras que Santos practicó por la tarde y se hospedó en el hotel Suerre, para hoy mismo viajar a Heredia.
Las puertas del Rosabal Cordero abren a las 6 de la tarde, pero desde dos horas antes habrá un cierre perimetral 100 metros alrededor del estuche.
Cien oficiales de Fuerza Pública velarán por el orden, más 120 de seguridad privada. Las entradas tienen un precio de ¢6 mil sol, ¢7 mil sol numerado, ¢8 mil sombra y ¢10 mil placo.
