El Tribunal Contencioso Administrativo (TCA) declaró procedente, la demanda interpuesta por el hoy exmagistrado, Moisés Fachler, a quien en el 2011 se le acusó de haber filtrado, supuestamente, un borrador de la sentencia del caso Crucitas. En su respuesta, dicho Tribunal ordena al Estado el pago de ¢10 millones al demandante, por concepto de daño moral subjetivo.
El TCA considera que el proceso disciplinario que se abrió contra Fachler fue ilegal, pues se dio cuando él había presentado la renuncia al cargo.
Al respecto, en la sentencia 51-2015-VI del 26 de marzo del año en curso, entre otros “se declara absolutamente nulo el acuerdo de la Corte Plena de la Corte Suprema de Justicia, tomado en el artículo único de la sesión extraordinaria número 38-2011 del quince de noviembre del dos mil once, en cuanto ordenó iniciar una investigación de carácter disciplinario en contra del ahora actor y designó al órgano director”.
Sobre el particular añade que: “por conexidad o en consecuencia, se anula todos los actos posteriores que resulten dependientes del citado acuerdo, incluyendo la totalidad del procedimiento administrativo seguido; el acto final dictado por la Corte Plena en el artículo IV de la sesión número 39-12 del doce de noviembre del dos mil doce, salvo en cuanto dispuso comunicar los hechos investigados a la Procuraduría de la Ética y a la Fiscalía General de la República; el acuerdo contenido en el artículo XXII de la sesión número 42-12 del tres de diciembre del dos mil doce; y el acuerdo del artículo XX de la sesión número 5-13 del once de febrero de dos mil trece”.
En el documento se señala que una vez que quede en firme el pronunciamiento, la Corte Suprema de Justicia deberá realizar los procedimientos internos correspondientes que permitan determinar las responsabilidades patrimoniales y/o disciplinarias de los funcionarios que participaron en las acciones u omisiones que llevaron a incurrir en los actos contrarios a legalidad que fueron anulados y que tuvieron como efecto la condena emitida.
Además el Estado deberá pagar las costas procesales correspondientes.
Consultado sobre el particular, Moisés Fachler sostuvo que sentirse muy contento, porque tanto en la vía penal y disciplinaria resulta ”completamente absuelto”.
“Creo que se hizo justicia y considero que este proceso disciplinario nunca debió ni siquiera haberse iniciado. En el proceso penal tuve un sobreseimiento definitivo del Ministerio Público y confirmado por un juez penal de Hacienda. Esa sentencia se convirtió en cosa juzgada y aún así, los magistrados en esa persecución presentaron hechos nuevos y también fueron rechazados porque ya había sido indagado al respecto. Esto fue una persecución que se me hizo y precisamente, para poderme defender, como hasta el día de hoy, tuve que renunciar a un puesto que era la culminación de mi experiencia profesional y someter a mi familia a un viacrucis doloroso y estar sometido a medios de comunicación que poco entendían del caso”, reafirmó Fachler.
PERIODISTA: Krissia Morris Gray
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Viernes 27 Marzo, 2015
HORA: 12:00 AM
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