La carrera para iniciar la construcción de la Terminal de Contenedores de Moín parece cruzar la meta con la aprobación de la Secretaría Técnica Nacional Ambiental (Setena), luego de crear una enorme expectativa del proyecto que tendrá un impacto social y económico para el país, especialmente en Limón.
Setena confirmó que otorgó la viabilidad ambiental al proyecto bajo expediente administrativo D1-7968-2012-Setena, con lo cual la empresa holandesa APM Terminals podrá iniciar a desarrollar la TCM, obra que supera los $1.000 millones y se otorgará en concesión por 33 años, este último punto fue el origen de una huelga por parte de los sindicatos portuarios.
En la resolución 2523-2014-Setena se indica: “Aprobar el Estudio de Impacto Ambiental (EsIA), el anexo y la información aportada al expediente y sometidos a evaluación por el desarrollador. Con fundamento en las consideraciones de hecho y de derecho antes expuestas, se otorga la viabilidad (licencia) ambiental al proyecto Terminal de Contenedores de Moín”.
“La TCM presentó el estudio de impacto ambiental, posteriormente la Setena emite una solicitud de anexo en la que pide una serie de aclaraciones, en ese término, además se ingresa información de otras partes interesadas, lo cual hace que entremos a revisar el expediente por completo. Ese proceso de revisión y análisis se dio este año, básicamente se determina que la empresa ha cumplido con los requerimientos”, detalló Freddy Bolaños, secretario general de Setena.
Según el directivo, al momento de otorgar la viabilidad ambiental, se le ordena al representante del proyecto, APM Terminals, depositar un monto de garantía, paralelamente deberá nombrar un equipo multidisciplinario de regencia ambiental y presentar un libro de bitácora, en tres días debe tener una declaración jurada de compromisos ambientales en escritura pública.
MITIGACIÓN DE IMPACTO
Bolaños aclaró que toda obra de ingeniería genera impactos, el problema se da cuando no se mitigan. En este caso se han mostrado en la documentación y en los estudios correspondientes hay medidas completamente justificadas para hacer la mitigación que además tiene en cuenta la magnitud de la obra.
En el proyecto se ha identificado el impacto que deberá mitigarse producto de la erosión en la costa, el transporte de sedimentos.
Después de que los analistas estudiaron el expediente acordaron que esos efectos se pueden aplacar con medidas claras, aún así Setena dictó medidas de control y seguimiento, “básicamente se está obligando al desarrollador para que las cumpla”, dijo Bolaños.
Por su parte, Paul Gallie, director general de APM Terminals en Costa Rica, se mostró satisfecho de la resolución de Setena y reafirmó la dedicación y la seriedad con la que la empresa se desempeñó durante el proceso de evaluación de impacto ambiental ante Setena demuestra la factibilidad que existe para materializar importantes iniciativas de inversión en Costa Rica. “Como empresa responsable, desde el inicio propusimos en Limón y Costa Rica un proyecto sostenible y respetuoso del medio ambiente y la comunidad. En nuestro estudio de impacto social y ambiental propusimos medidas preventivas, de mitigación y de compensación; programas de conservación de especies incluyendo las tortugas; programas integrales dirigidos a la comunidad”, detalló.
