Un peón murió y otro está muy grave luego de ser noqueados por pesadas tucas mientras hacían labores de rutina. En ambos casos los hechos se dieron frente a sus compañeros y allegados.
El primero de ellos ocurrió en la lejana Reserva Indígena de Alto Buruquis de Corredores, Zona Sur. La víctima fue Cecilio Muñoz Rodríguez, de 38 años.
Este hombre labraba la tierra cuando de repente un árbol que estaba falseado se desprendió y lo impactó entre la espalda y el hombro, acción que lo prensó violentamente contra el suelo.
Sus allegados al escuchar el bombazo corrieron y lo hallaron debajo del pesado trozo de madera. Cuando llegaron los cuerpos de socorro, el hombre ya estaba sin vida.
OTRO CASO EN ASERRADERO
Greivin Valverde Robles, vivió una situación similar, sin embargo, logró escapar de la muerte, aunque permanece en condición grave.
El hombre de 29 años estaba laborando en un aserradero en La Rita de Pococí cuando el trozo lo impactó en la espalda, dejándolo tendido en el lugar ante la mirada atónita de sus compañeros, quienes muy asustados corrieron a buscar ayuda.
El golpe pudo afectar la columna vertebral del trabajador, pues estuvo inmóvil por un rato, hasta que la Cruz Roja llegó al sitio para valorarlo y llevarlo al centro médico en condición delicada.
“Tenía dificultad respiratoria muy marcada, además de un estado de consciencia alterado. Se trasladó hasta el hospital Guápiles”, dijo Ronald Brenes, paramédico.
Por su condición, los médicos decidieron remitirlo al Hospital Calderón Guardia para ser atendido por especialistas.
PERIODISTA: Redacción Diario Extra
CRÉDITOS: Orfilia Díaz Corresponsal
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Miércoles 26 Noviembre, 2014
HORA: 12:00 AM
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