Desde el 2006 el Banco Central de Costa Rica (BCCR) optó por establecer de forma transitoria un sistema de bandas cambiarias, que establece un tope al movimiento del precio del dólar, al colocarle un piso en ¢500 y un techo en ¢852,45.
Para el gerente general del Central, Eduardo Prado, las bandas ya no cumplen ninguna función.
“Ya, de hecho, la banda cambiaria es irrelevante, tenemos un tipo de cambio que se ha estado movimiento hasta a un 8% y un 9% del límite inferior, y bien largo del superior; prácticamente los dos límites son irrelevantes hoy. El tipo de cambio ha estado alejado de esos valores (…) Ya tenemos varios meses en que la cotización por tipo de cambio de ¢500 por dólar, ha estado prácticamente en flotación”, explicó Prado.
Desde hace varios años se ha especulado sobre cuándo será el momento en el que de forma oficial el gobierno ordene el paso al sistema de flotación administrada, el cual consiste en quitar las bandas y que el Central intervenga solo en casos extremos.
“La decisión de una flotación administrada el Presidente del Banco Central lo ha comentado, cuándo se puede producir, no podemos precisar fechas, efectivamente porque en este tipo de decisiones siempre hay algunos agentes que perciben más información que otros, y anunciar una previamente puede hacer generar rentas para algunos grupos en detrimento de otros”, sostuvo Prado, sin embargo segundos después señaló que es probable que se dé en un corto plazo, que oscila entre seis meses y un año.
“Va a depender de las condiciones de la economía nacional e internacional, que sean favorables”, indicó Prado.
El jerarca resaltó la estabilidad en la que se ha mantenido el precio del dólar y asegura que ese mismo panorama lo proyectan para el próximo año.
“¿Cómo ha logrado la estabilidad en estos meses? El Banco Central introdujo una modificación de excluir y gestionar las divisas del sector público de una forma un poquito diferente a como lo venía haciendo y es el mercado el que se ha ordenado y ese orden ha generado que el tipo de cambio muestre una relativa estabilidad”, concluyó Prado.
