Manzanillo.- La vida del Jorge Ricardo Peña Dosman cambió de la noche a la mañana. Este pescador de 54 años vio como su machete, esa lancha con la que lleva el sustento a sus 5 hijos y algún cariñito para sus 10 nietos, al amanecer ya no estaba en la playa de Manzanillo.
Corrió, preguntó, tocó puertas y tras mucho investigar dio con que un narco la tiene en su poder para cometer sus fechorías. Cuenta que pudieron llevársela arrancada o hasta remolcada, pero según sus cálculos, está en Limón.
Tras muchas gestiones dice que las autoridades no le quieren dar pelota a su caso, que lo mandan de un lado a otro pero necesita una solución, pues es la herramienta para dar sustento a su familia.
A la orilla de la playa, bajo un fuerte sol, pero soportable apenas por la brisa marina, este panameño de nacimiento, con 35 años de radicar en Manzanillo, contó su historia al Periódico de Más Venta en Costa Rica.
¿Qué le sucedió?
-Soy pescador y vivo en Manzanillo desde hace 35 años. También me dedico al turismo.
Tenía mi lancha anclada, una eduardoño con motor 200, cuando salí a pescar no la vi en la playa. Investigué y me di cuenta que estaba en una bodega en Limón. Puse la denuncia ante el OIJ pero tal parece que no me quieren ayudar. Les pregunto si le tengo que pagar a alguien y me dicen que no, pero no se quieren meter en ese problema.
¿Le dieron alguna otra respuesta?
-Me preguntan cómo puedo asegurar que se trata de mi lancha, pero yo les contesto que tengo los documentos con las características. Sin embargo, me responden que no pueden hacer nada porque es un problema meterse ahí si no estoy seguro de que es mi lancha. Yo le digo que tengo testigos y fotos.
¿Tiene esos documentos?
-Sí, los tengo en Incopesca y la Capitanía.
¿Cuál es la matrícula de esa lancha, tiene alguna característica particular?
-Es la L-2508 pero ellos borraron todo, banderas y nombres, todo.
¿Sospecha quién tiene su lancha?
-Sí, la tienen en una bodega de un poderoso grupo, de los cuales unos ya están fallecidos y otros todavía enfrentan a la justicia.
¿Ha tenido posibilidad de comunicarse con ese grupo?
-No, no he ido donde ninguno. Me han dicho que fuera a hablar con uno de ellos pero yo tengo miedo, yo no puedo ir así, sin la autoridad.
¿Qué le pide a las autoridades?
-Que me ayuden a recuperar mi lancha. Yo sé que es difícil obtener el motor porque cuando lo roban le quitan la matrícula, lo meten como reconstruido y le sacan documentos otra vez.
¿Cuánto vale esa lancha?
-Está valorada en ¢8 millones y el motor en 13 mil dólares, porque es un 200 Yamaha. Todo puede andar en unos ¢15 millones.
¿Cómo pudo adquirir usted la lancha?
-La compré a un señor llegando a Limón, por Viscaya. Él la tenía abandonada y me la vendió a $1.500 pero yo le metí plata y la dejé como nueva.
¿Por qué se la dejó en ese precio?
-Porque no la quería y la tenía abandonada.
¿Cuál problema le ha generado no tener la lancha?
-Mucho, porque con ella le daba sustento a mi familia. Yo vivo del mar, no tengo otro trabajo, ni he estudiado.
PERIODISTA: Alejandro Fonseca
CRÉDITOS: Fotos: Cristian Cartín
EMAIL: [email protected]
Miércoles 01 Octubre, 2014
HORA: 12:00 AM
SIGUIENTE NOTICIA