La mayoría de los costarricenses está cansada de las agendas paralelas impulsadas por el gobierno de Carlos Alvarado, mientras persiste la ausencia de acciones que impulsen la reactivación económica.
Esa es la visión de la diputada Shirley Díaz del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), quien cuestionó el afán del Poder Ejecutivo de impulsar agendas internacionales como la norma técnica del aborto terapéutico o la entrada en vigencia del matrimonio igualitario.
La congresista socialcristiana conversó en entrevista con Iary Gómez, gerente general de los medios del Grupo Extra y con Paola Hernández, directora de DIARIO EXTRA. A continuación un extracto de su conversación que compartimos con nuestros lectores.
¿Cómo cataloga la agenda de proyectos impulsadas por el Poder Ejecutivo?
- Costa Rica está cansada de agendas paralelas, de prioridades que no son las prioridades de la mayoría de los costarricenses, de perder a sus hijos producto de la depresión, de encontrar a los agricultores sin una solución a sus problemas, al pequeño, mediano e incluso al gran empresario sin solución a sus problemas de crédito, de capacidad productiva. Costa Rica está harta de que el gobierno se avoque a temas que no son de interés nacional y que respondan a agendas internacionales, o sea que son ajenas a la idiosincrasia costarricense.
¿Los considera una agenda light?
-Creo que es la agenda internacional. El Gobierno de la República no tuvo agenda. La única agenda que tuvo fue el matrimonio igualitario, fue la norma técnica a favor del aborto, fue el tema de ir legitimando de una u otra manera las ayudas para ciertas poblaciones de Costa Rica sin tomar en cuenta las mayorías en condiciones de pobreza. El gobierno ha estado en ayuno de iniciativas más allá de cobrar más impuestos, ha sido muy ayuno en la política de austeridad sobre el gasto público, ha sido muy incompetente en cuanto al manejo de los recursos de la banca para paliar la crisis, incluyendo la Banca para el Desarrollo. Creo que el gobierno tiene que aterrizar, porque si no aterriza va a tener las consecuencias naturales de no aterrizar en medio de una pandemia.
Si hay tal disconformidad con el gobierno, ¿cómo es que el pueblo no puede contrarrestar la política de temas que no son de la importancia de la mayoría?
- Lo que ha sucedido es que ha venido golpeándose sistemáticamente la organización social. Es decir, no solo ha habido un ayuno de una agenda nacional de reactivación económica y de prioridad nacional, sino que también ha habido una agenda solapada que ha venido a desarticular la organización social. Entonces se han golpeado a los sindicatos, se golpearon a las Iglesias, se golpearon a las asociaciones solidaristas, las asociaciones de desarrollo y a las cooperativas también con el plan fiscal. De una u otra manera todo lo que sea organización social se está desmovilizando, por lo que lo primero que se debe tener es una claridad absoluta como pueblo de que lo que se está dando en Costa Rica es una desarticulación de la organización social y que no se puede permitir que esto pase.
¿Pero no sería doble bandera el decir que no les preocupa la parte social? Vea con los bonos Proteger.
- Pero eso es asistencialismo, eso no es preocuparse por la parte social. El pueblo debe tener claro que eso es asistencialismo. Un Estado que no vele por la dignidad de la persona no es un Estado que esté a favor de la lucha social, es un estado asistencialista, es decir, el Estado que se encarga de regalar los bonos Proteger, que está dispuesto a regalar latas de zinc, a mantenerse en el poder a costa de la ayuda social. Eso es muy distinto al Estado que genera cambios, que genera un monto económico, una redistribución de la riqueza, al Estado que facilita las condiciones para que haya emprendimientos y para que las personas dignamente se ganen su plata y la gasten en lo que quieran. El gobierno está gestando un Estado asistencialista y no es capaz de generar el cambio que el país necesita.
¿Qué tanto le ayudó a este gobierno la llegada de la pandemia?
- Bajo ese esquema le cayó como anillo al dedo, porque yo creo que ya se venía sintiendo la necesidad de un cambio imperante. Ya se estaban, digamos, rompiendo los niveles de tolerancia de un pueblo que es civilista y democrático por tradición como es el pueblo costarricense, pero no había llegado el primer caso de Covid-19 cuando ya en las conferencias de prensa decía el ministro de Salud que ya venía el Covid-19 y no había llegado aún, que iba a ser inminente la contaminación de Costa Rica, que no se iba a parar que ese proceso se diera.
¿Desvió el coronavirus las polémicas de la UPAD y del préstamo del tren eléctrico?
- Por supuesto, porque la efervescencia social estaba llegando ya a niveles de intolerancia. Cae el Covid, hace una distorsión enorme en la información televisiva, aquí no volvieron a darse asesinatos, no volvieron a haber robos, no volvieron a haber más problemas, solo Covid, Covid y Covid. Es dificilísimo poder llevar adelante cualquier tipo de articulación ante un momento donde todo se invisibiliza a través de los medios masivos. Ahora, yo no sé por cuánto tiempo lo lograrán, eso no lo sé, porque yo sí siento que ya se está llegando a un nivel que Costa Rica nunca había vivido.
A usted que está en la Asamblea Legislativa… ¿por qué tanta complacencia de los diputados?
- Lo desconozco porque yo no he tenido ninguna complacencia. Me he movido en mis decisiones absolutamente clara y convencida de que lo que no le conviene al pueblo, no le conviene. Aquí no tiene por qué haber influencias externas en la conciencia sobre los criterios técnicos y hay cosas que no se deben dar porque perjudican al pueblo.
¿Cuánto impactó el plan fiscal?, ¿y qué tan vulnerable se vio el costarricense en momentos de pandemia?
- ¿De qué nos valió a nosotros recaudar en el plan fiscal si también subió los gastos el gobierno? Prácticamente, se fue lo comido por lo servido, porque abrieron más plazas, lejos de aprovechar el aporte que se logró a la luz del plan fiscal, lo que hicieron fue incrementar los gastos. Tenemos que ser claros en que las decisiones que han venido tomando muchas veces no son las correctas y en mi caso lo he denunciado tal cual y he votado en contra de todas esas cosas. Se necesita un plan fiscal, pero no el aprobado, el cual es injusto y que no entró en la elusión.
El presidente Carlos Alvarado no descartó más impuestos, ¿estamos en tiempo de eso?
- Meter más impuestos es golpear más la economía. Para mí sería dar un golpe tremendo a lo que queda para evitar la recesión. Si saben contar, que no cuenten conmigo, porque definitivamente no es un buen momento para generar impuestos.
¿Habría condiciones para que se diera algún apoyo a nuevos tributos?
- Sí, si se promueve de la mano de la reactivación económica y políticas claras, contundentes y que van a ser que la economía arranque porque va a darse una disminución importante en los costos de operación de las empresas en la readecuación de los créditos, en las condiciones con las que se debe seguir aportando en la Caja del Seguro para que las empresas puedan solidariamente de verdad meterle al hombro y que se sostenga la seguridad social de este país, después de evaluarlo unos meses y si hay que hacer una readecuación a nivel de impuestos, analizándose cuáles son los sectores más vulnerables, siendo impuestos no necesariamente iguales para todo el mundo y analizando la evasión y elusión con seriedad, podemos conversar.
¿Cuál es la hoja de ruta que debe seguir el gobierno en reactivación económica?
- Creo que hay recursos que son fundamentales y que tienen que estar dentro de la ruta de la reactivación económica. Por ejemplo, el precio de la electricidad, la forma en que se calcula la electricidad. El precio de los combustibles y la coherencia entre lo que cuestan a nivel internacional y a nivel nacional, que se hizo una excepción por lo del Covid, pero esa situación no puede permanecer intacta para siempre, eso tiene que cambiar pronto. El otro aspecto importante es la carga obrero-patronal, el tema de la informalidad, cómo hacemos para que la informalidad vuelva a formar parte de la formalidad y con ella aporte al régimen de la seguridad social de este país. El problema es que hay un porcentaje de población en la informalidad escandalosa en este momento. Hay que ponerle atención al tema del crédito y la readecuación de las deudas.
¿Es el tren eléctrico el proyecto para impulsar la reactivación económica?
- El problema con el tren eléctrico es que los expertos en el tema han denunciado que está muy caro y han denunciado que las líneas que se están poniendo en funcionamiento en su totalidad al mismo tiempo no es lo recomendado para que el tren eléctrico funcione correctamente y no sea un subsidio muy grande por parte del Estado en el momento en que se dé la ejecución y el funcionamiento del tren. El problema no es que no queremos un tren, sino que ocupamos un tren que nos sirva con la línea férrea que tenemos y no con una que vaya a encarecer los costos. Se espera que eventualmente no se tenga una capacidad de uso para esa infraestructura que están haciendo.
¿Vendría a resolver el tema de movilidad?
-Pienso que si el gobierno hubiera tenido un verdadero interés y un genuino compromiso con la reactivación económica, con el bienestar general de la población de este país y con lo que le correspondía como urgencia en el momento en que amenazó la pandemia, el país tal vez vería con mejores ojos el trencito, pero el problema es que siendo tan contradictorio y tanta la incapacidad de llevar adelante al país y llevar este barco a buen puerto, nadie puede ver con buenos ojos algo que tiene cuestionamientos seriecísimos porque no es un gobierno que tenga la legitimidad que debería tener para pedir un préstamo tan grande y no han hecho los méritos.
¿Qué le parece que el protocolo sobre aborto terapéutico firmado por el Ministerio de Salud en diciembre de 2019 aún no sea de conocimiento público?
-Lo veo muy mal porque me parece que hay una falta de transparencia, se le dijo al señor presidente ejecutivo de la Caja que nos trasladara el documento que fue visto por la Junta Directiva, pero quiero que quede claro que la Junta Directiva no lo aprobó, no lo avaló. La Junta Directiva se limitó y dijo que no era su competencia, sino del ministro de Salud la firma de ese protocolo. Ya le mandé una carta a don Román Macaya y me contestó que el ministro de Salud es la persona que tiene en este momento el protocolo y que no se ha terminado.
¿En qué se basará el gobierno para aplicar ese secretismo en el proceso?
-Se está manejando con poca transparencia y lo que quisiera es entender la lógica que aplican ellos en relación con este tema sabiendo que Costa Rica es un país pro vida. ¿Por qué se sabe que Costa Rica es un país pro vida? Porque las marchas lo han dicho, porque las manifestaciones populares lo han dicho. Entonces es sumamente importante para mí que tengamos una claridad absoluta del contenido de tal protocolo y también quisiera saber qué opina la Sala Constitucional de las acciones de inconstitucionalidad que le dieron curso.
EXTRADIRECTO
• Agenda paralela: Ayuno de agenda nacional
• Reactivación económica: Debe ser prioridad en Carlos Alvarado
• Tren eléctrico: No debe prevalecer sobre otras prioridades
• Asistencialismo: Característica de gobiernos socialistas
• Bono Proteger: Transparencia y rendición de cuentas.
• Norma técnica: Aborto legal solapado
• Plan fiscal: Medida tributaria regresiva
PERIODISTA: Greivin Granados
CRÉDITOS: Foto: Isaac Villalta
EMAIL: [email protected]
Martes 11 Agosto, 2020
HORA: 12:00 AM
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