El problema no son las empacadoras agrícolas, sino las fallas del control migratorio. Así de contundente fue el presidente de la Cámara de Agricultura y Agroindustria, Juan Rafael Lizano, al referirse a las declaraciones del ministro de Salud Daniel Salas.
El jerarca declaró que: “Se ha visto relación con actividades agrícolas o de empaque o de este tipo de actividades que están haciendo que el aumento de casos (de Covid-19) sea fuerte”. Lo anterior, en referencia a ciertos cantones del país.
En Costa Rica, la mayor parte del empaque se concentra en piña, banano y yuca. Lizano comentó que el problema consiste en que nicaragüenses enfermos del nuevo coronavirus están llegando adonde familiares que trabajan en una u otra finca.
En algunas de estas zonas rurales, hay extensas barriadas de extranjeros que se asientan y podrían estar constituyendo un foco de contagio.
“Las empacadoras están en orden, nada tiene que ver la actividad agrícola con la migratoria. Las empresas tienen activados sus protocolos e incluso hay una separación entre empacadores y reducción de jornada. El frío no está en las empacadoras, está en la frontera. No entiendo por qué nos van a echar la culpa a nosotros”, aseveró Lizano.
El empresario, quien también fue ministro de Seguridad, añadió que sabe que el gobierno está haciendo todo el esfuerzo posible para detener la migración, pero es muy difícil por las características de la frontera, que tiene muchos huecos.
Hay preocupación de que una persona asintomática llegue a una planta porque podría infectar a otros afectando miles de empleos en caso de que se aplique un cierre y manden a cuarentena.
La mayor parte de las empacadoras se ubican en San Carlos, Guácimo y parte de San Ramón. Para Lizano, de ser cierta la tesis de salud habría que explicar por qué también los casos se están disparando en Bagaces, Cañas y Liberia.
Laura Bonilla, presidenta de la Cámara de Exportadores de Costa Rica (Cadexco), dijo que, si bien las empresas tienen protocolos, el Ministerio de Salud debería emprender otras acciones para mitigar el impacto, tomando en cuenta cómo se va a ver afectado el empleo si pasara algo peor.
“Es un problema, una realidad de un país vecino y un problema migratorio. La solución está en buscar el equilibrio entre la salud y lo económico. El problema es que afecten a industrias de parafina y cartón”, según manifestó.
Abel Chaves, presidente de la Cámara de Productores y Exportadores de Piña, coincide en que hay un fallo migratorio. “Nadie tiene el contexto de cómo viven estas familias. Es muy difícil para las empresas controlar eso”, acotó.
Para Guido Vargas, secretario de UPA Nacional, Salud debería aclarar en qué sustenta sus declaraciones. “A mí me preocupa este tipo de declaraciones. Hay protocolos elaborados y en el campo es donde se cumple más aquello del distanciamiento social. Hay mano de obra extranjera, pero es la que ya estaba en el país, no tener mano de obra para la cosecha sería la ruina del sector cafetalero”, recalcó.
PERIODISTA: María Siu Lanzas
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Viernes 05 Junio, 2020
HORA: 12:00 AM
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