Los diferentes centros médicos de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) se encuentran en la obligación de atender a todas las mujeres embarazadas, independientemente de su categoría de aseguramiento, nacionalidad o condición migratoria.
Así lo recomendó la Defensoría de los Habitantes, tras analizar las denuncias que se plantearon en los últimos tres años. En las mismas se reflejó que muchas de las pacientes no fueron valoradas por encontrarse morosas con alguna de las modalidades de dicho seguro.
“La situación generó que las mujeres no acudieran a las citas de control prenatal, por no tener cómo cancelar la deuda y con ello evitar que ésta siguiera creciendo.
Asimismo, se les denegaron exámenes médicos y medicamentos, además se les omitió la licencia de maternidad a las trabajadoras migrantes, pero sí se les rebajaron las cargas sociales.
En el último informe final con recomendaciones, se le reiteró a la Caja Costarricense de Seguro Social la obligación de garantizar la atención prenatal a las mujeres gestantes en condición de pobreza o indigencia médica”, ampliaron en un comunicado de prensa.
La circular respectiva se dirigió a todos los directores y directoras regionales de las Red de Servicios de Salud, personas administradoras de Hospitales y Áreas de Salud, personas jefas y encargadas de Validación de Servicios Médicos.
