Eficacia de un poder de representación en el tiempo
Lic. Gerardo Morales
CONSULTA: Mi pregunta es sobre un poder que me dio un familiar para vender una finca. La he gestionado mucho tiempo, pero mi pariente estaba mal de salud y hace poco falleció. Quiero saber cuál sería la vigencia de ese poder generalísimo, o si por el hecho de morir, se termina el poder.
RESPUESTA: El poder es un procedimiento de carácter civil por el que la ley permite que una persona jurídica, como sociedad o asociación, pueda actuar, ya que son personas de creación o ficción legal, que necesitan a un individuo para que las represente.
Por ejemplo, el Estado es la persona pública por excelencia, pero no puede actuar, sino por medio de sus representantes en cada caso y por eso, al ser demandado, requiere de la representación de la Procuraduría General de la República.
Pero en el ámbito privado, también se puede dar la representación, incluso de persona a persona.
Como los actos que el representante realice recaen negativa o positivamente en el que otorga el poder, el poderdante, es básica la confianza que debe existir para que exista.
El poder se revoca con solo la decisión del poderdante, ya sea que el poder esté inscrito, con solo una escritura de revocación que debe presentarse.
Pero basta la comunicación efectiva, para eliminar las facultades del apoderado.
El fallecimiento del poderdante o el apoderado también terminan automáticamente el mandato, pues los difuntos no tienen voluntad y en el caso del apoderado, no puede actuar.
El poder otorgado por un fallecido cesa tan pronto esté incapacitado para manifestar su voluntad.
