La tensión sobre el proyecto de Lucha Contra Fraude Fiscal alcanzó ayer uno de los puntos más altos en la negociación. Los partidos de oposición lograron imponer en la primera etapa del día un texto sustitutivo, con el que se variaba las aspiraciones con las que el Gobierno presentó el proyecto a la corriente legislativa. Dentro de los polémicos cambios están ampliar el plazo a diez días (cinco días de audiencia y cinco de resolución) para que un juez pueda ordenar un embargo de bienes registrales a los presuntos evasores; eliminar la protección a los inversionistas minoritarios sobre las actuaciones de la junta directiva en las que incumplieran obligaciones tributarias; eliminar la responsabilidad de los asesores tributarios que firmen en conjunto con el contribuyente las declaraciones juradas y cambiar el concepto de beneficiario final
El Frente Amplio, el Partido Acción Ciudadana y el Gobierno, se venían manifestando en contra de estas pretensiones. Programaron una conferencia de prensa, en la que expondrían a los partidos de la alianza como “alcahuetes” de quienes quieren robar el dinero en el país.
Así lo señaló a DIARIO EXTRA el jefe de fracción del Frente Amplio, Edgardo Araya, quien asegura que cancelaron la conferencia por solicitud de la alianza, que, a su criterio, entendió se trataba de “una llamada a de atención”
“Se ha hecho un esfuerzo importante para hacerles entender que lo que habían aprobado desmejora sustancialmente el proyecto, lo debilita, y le deja más posibilidades a quienes quieren robar al país”, sostuvo.
Así las cosas, en la sesión nocturna lograron que se revirtiera el tema de accionistas minoritarios, de sanciones a asesores tributarios, y agregaron una medida provisionalísima de forma tal que un juez en el plazo de cinco días de audiencia que se le da al presunto evasor, pueda ordenar de forma inmediata el embargo. Además, esperan que antes del 27 de agosto, fecha máxima para dictaminar el proyecto, aplicar otros cambios. Consultada por este medio, Rosibel Ramos, presidenta de la Comisión de Hacendarios, quiso rechazar que estuvieran cediendo ante el Frente Amplio y el PAC.
Calificó los cambios como “detallitos que pueden fortalecer el proyecto”, el cual se mantiene en discusión y resaltó que nunca sintieron presión por la eventual conferencia.
