Un padre de tres hijas acudió a la Sala Constitucional para que los Magistrados analicen el hecho de que está obligado a pagar este mes ¢2,300,000 por concepto de pensión alimentaria y gastos de entrada a clases.
Se trata de Jorge Alvarado quien asegura que desde que le fijaron la pensión alimentaria en noviembre del 2014 vive un infierno.
"Lo que me hizo llegar aquí es la desesperación entre pensión de diciembre, aguinaldo, pensión de enero y gasto escolar tengo que pagar más de 4 millones" aseguró el recurrente quien llegó acompañado de la presidenta de la Fundación instituto de Apoyo al Hombre (Fundiapho), Eugenia Quesada.
De acuerdo con la experta en familia los jueces y juezas ha aplicado como obligación de los deudores alimentarios el salario escolar, sin embargo este no está establecido en el Artículo 37 del Código de La Niñez y La Adolescencia como tal sino como el pago de gastos extraordinarios de entrada a clases.
Ese es el primer error que se comete porque no todos los trabajadores reciben este beneficio y el segundo error que se comete a criterio de la abogada es imponer el mismo monto de los gastos escolares que el pago de la pensión alimentaria.
"Es un error de interpretación que se hace a partir de una circular enviada por el Consejo Superior en el que se indicaba que debía establecer el monto de los gastos de entrada clases en el momento en que se establecía la pensión", resaltó la abogada de Fundiapho.
Quesada explicó que la cuota de gastos extraordinarias de entrada a clases no puede ser la misma que el monto de la pensión porque esta última está contemplada para gastos de vivienda, comida, salud por lo que es improcedente que se fije la misma cantidad.
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Hombre presenta recurso contra monto del salario escolar
