Ocho meses bastaron para que agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Guápiles con colaboración de otras regiones desarticularan una organización criminal a la que se le atribuyen dos macabros homicidios, más otras causas que están por definirse relacionadas con el tráfico internacional de drogas.
El principal sospechoso y supuesto autor intelectual es un empresario josefino de apellido Vargas, quien fue arrestado por agentes judiciales de San José en su casa de habitación, en un lujoso residencial al oeste de la capital.
Según informaciones confirmadas por el director del OIJ, Gerald Campos, en las transacciones de pagos a los sicarios de la banda se habrían girado cerca de ¢20 millones.
“Tenemos informaciones de que se trata de una guerra entre dos organizaciones narcotraficantes, por supuestos tumbonazos de droga y por los cuales comenzaron a haber disputas serias, son dos homicidios los que tenemos registrados hasta ahora pero paralelo a esta investigación tenemos otras causas abiertas a la espera de la presentación de un informe ante la Fiscalía”, destacó Campos, director de la Policía Judicial.
Fueron en total 14 allanamientos en diferentes sectores como Matina, Batán, Guápiles, Belén, Desamparados, Rorhmoser, incluso se allanó una vivienda a tan sólo 200 metros de los Tribunales de Justicia de Guápiles.
9 SANGUINARIOS EN CELDAS
En los operativos, en los que participaron al menos 70 agentes judiciales, se logró la detención de nueve individuos, todos con antecedentes penales por vínculos con narcotráfico y homicidios.
Además, el fiscal general de la República Jorge Chavarría, confirmó que hay aún tres hombres en fuga y que en las próximas horas sus nombres serán lanzados con orden de captura.
“Estamos continuando con las pesquisas para lograr recabar la mayor cantidad de datos, hasta ahora hemos decomisado ¢65 millones en efectivo, y estamos en la búsqueda de una subametralladora Ak-47”, declaró Chavarría.
El primer homicidio que se le atribuye a esta banda, ocurrió en enero de 2015 en el sector de Cariari, en esa oportunidad murió un joven identificado como Ademar Jiménez, quien supuestamente participó de un tumbonazo de cocaína.
Tres meses más tarde, en Batán, fue asesinado el joven Pablo Barrantes quien según el OIJ es inocente, pues era un comerciante encargado de distribuir e instalar vidrios para ventanas.
DIARIO EXTRA supo que hace dos semanas uno de los sospechosos que se encuentra en fuga, recibió varios disparos en su propia casa ubicada en Goly de Matina, pero logró escapar por el patio de su vivienda, al momento del ingreso de los agentes a la casa, el sospechoso identificado como “Biggie” no se encontraba pues según vecinos había salido en horas de la noche anterior en su lujoso carro.
Los detenidos fueron enviados a la Fiscalía de Guápiles, donde pedirán medidas cautelares contra 7 de los 9 detenidos.
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CRÉDITOS: Fotos: David Barrantes y Randall Sandoval
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Viernes 21 Agosto, 2015
HORA: 12:00 AM
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