Una aeronave con matrícula costarricense TI- BAA se estrelló en el Bajo Baudó, en el departamento colombiano de Chozó, y su piloto perdió la vida tras el impacto, luego de que fuera al parecer robada en la Zona Sur de nuestro país.
Según los registros de Aviación Civil, la aeronave despegó este domingo a las 7:05 a.m. del Aeropuerto Tobías Bolaños, en Pavas, y según consta en el plan de vuelo iba con destino a Puerto Jiménez, adonde llegó a las 8:05 a.m.
En el aterrizaje se reporta el piloto costarricense Carlos Montes de Oca, quien cerró el plan de vuelo, y horas más tarde se dio la voz de alerta sobre el robo.
Enio Cubillo, director general de Aviación Civil, confirmó la tarde del domingo (3:19 p.m.) se recibió una alerta de ELT (Emergency Locator Transmitter, por sus siglas en inglés) en el centro de información de vuelo, quienes procesan estos datos ubicando a la aeronave en Pizarro, Colombia.
“A partir de este momento se procede a ubicar a las personas que se tiene registradas como responsables de la aeronave, localizando al piloto Carlos Montes de Oca, quien manifiesta que él se encontraba en Matapalo. Que ahí la aeronave quedó debidamente instalada en aeropuerto de Puerto Jiménez desde horas de la mañana”, explicó.
Cubillo agregó que en coordinaciones con seguridad aérea y las autoridades de la Fuerza Pública se logra determinar que el aparato no se encuentra, posteriormente, las autoridades de aviación de Colombia confirman que la avioneta se accidentó 200 metros antes de llegar a la pista de aterrizaje de Pizarro, en Colombia.
Según los reportes, la avioneta privada Cessna 172N Skyhawk 100 II del año 1976 portaba una matrícula adulterada con calcomanías.
“No tenía un plan de vuelo, sin autorización de ambos países, acudimos en buscar para dar socorro al ocupante que incumplió todos los estándares de navegación. Lo más seguro era que terminara en un accidente, luego de que volara muy bajo para presuntamente evitar ser detectado por los radares”, agregaron las autoridades.
PRIMER ROBO
Según las autoridades, es el primer robo de una avioneta que se da en nuestro país, luego de que fuera aparentemente manipulada en algún aeropuerto nacional, donde le cambiarían la matrícula TI-BOG que no existe.
Trascendió que el aparato, que normalmente transporta tres pasajeros y es de un solo motor, fue vendida a un gringo luego de que negociaran con un italiano que supuestamente estaba en Tamarindo; posterior a ello un colombiano la habría colocado en Pavas.
Algunos vecinos de Puerto Jiménez se mostraron sorprendidos por el presunto robo y aseguraron que siempre existe un movimiento constante de personas y que es poco creíble que hayan dejado la aeronave abierta.
Presuntamente hace 20 días un helicóptero habría llegado muy cerca de donde estaba la avioneta TI- BAA en Guanacaste, se estuvo 10 minutos y después despegó alrededor de las 3 a.m., lo que les pareció muy sospechoso a los lugareños. La identidad del piloto fallecido aún no ha sido confirmada, mientras que el tico que la reportó ante el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) no se logró ubicar por razones de seguridad. En el sitio del percance las autoridades colombianas no encontraron ningún otro tripulante o pasajero a bordo.
