Una verdadera emergencia vivieron este domingo los pacientes y el personal del Hospital Monseñor Sanabria, cuando tras un fuerte aguacero parte del techo en el servicio de laboratorio quedó literalmente en el suelo, mientras el agua llegó hasta los pasillos que conducen a maternidad y neonatología, debido a que una canoa interna se rompió y amenazaba con causar estragos.
Otros de los servicios afectados por la lluvia fueron el laboratorio clínico, fisiatría, lactantes y el área de encamado. Los representantes de la Unión de Empleados de la Caja (Undeca), indicaron a DIARIO EXTRA que desde hace varios días advierten de la situación sin que “se haga nada al respecto”.
Ante esta delicada situación y la amenaza de los trabajadores de paralizar los servicios, si no hay una solución al problema, DIARIO EXTRA consultó al director del centro médico, Dr. Randall Álvarez quien reconoció la situación, pero garantizó que ningún paciente, trabajador o equipo sufrió algún daño debido al percance.
“Tenemos un problema de alcantarillado, el agua se metió por un jardín interno, también estaban obstruidas algunas canoas y como después que se metió el agua algún equipo podría dañarse lo trasladamos de lugar, en este momento junto al departamento de arquitectura de la Caja realizamos las reparaciones con el objetivo de mitigar la emergencia”, dijo el Dr. Álvarez.
Sobre la amenaza de huelga, indicó que durante ayer se reunieron con los representantes de Undeca para explicarles la situación y los diferentes trabajos, lo cual dio como resultado que desistieran del movimiento de protesta.
Tras el terremoto de Nicoya el centro médico sufrió serios daños los cuales incluso obligaron su evacuación, mientras que la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), ha invertido alrededor $8 millones para rehabilitarlo con el objetivo que los 256 enfermos que atienden, no sufran tanto por las incomodidades y carencias, pero la construcción del nuevo hospital para los puntarenenses podría iniciar hasta el 2017.
Asimismo, Alvarez reconoció que aún faltan algunos servicios por mejorar y mordernizar como lo son ginecobstetricia y neonatología pediátrica, por eso esperan que pronto la junta directiva del CCSS, dé su visto bueno y les entregue el dinero que necesitan para iniciar estas obras.
PACIENTES SIN DATOS
S
i usted es de los pacientes que esperan una llamada del Hospital Monseñor Sanabria, para que le digan cuando y a qué hora lo atenderán y su teléfono no suena recuerde no quejarse, porque quizá usted es uno de los enfermos a quienes no pueden localizar.
El Dr. Randall Álvarez, director del centro médico, pide a quienes requieran algún tipo de atención, presentarse a las clínicas, ebais e incluso el hospital para actualizar sus datos e indicar algunos datos como son: el número de teléfono y lugar donde vive.
“Tenemos grandes problemas ya que muchas veces tenemos que llamar a 50 personas para que lleguen 10, ya que los números son otros o ya no pertenecen al paciente”, recalcó.
Con el objetivo de disminuir la lista de espera, en el Monseñor Sanabria realizan operaciones vespertinas y fines de semana en ortopedia, cirugía general y oftalmología, de ahí la urgencia de que los asegurados estén al día con sus datos.
