La crisis en el servicio de cardiología del Hospital México, el cual indica que 80 pacientes murieron mientras esperaban un tratamiento así como el desorden en el Hospital Calderón Guardia, son dos de las crudas realidades que revelan los informes de auditoría de la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS) en poder de DIARIO EXTRA, confirman lo dicho por la presidenta ejecutiva de la Caja, María del Rocío Sáenz: “La Caja está pegada con chinches”.
Los números en rojo del Seguro Social por demanda de medicamentos, citas y exámenes, entre otros servicios, por parte de los asegurados, tampoco tienen eco en Casa Presidencial, ya que el mismo presidente Solís afirma que debido a la estructura y complejidad de la institución, la solución a los problemas no llegará pronto.
“Desde hace muchos años la Caja viene dando golpes de baldazo”, respondió ayer el mandatario ante la consulta de DIARIO EXTRA, sobre los plazos del gobierno para solucionar un problema que prometió ponerle fin en campaña.
Sin embargo, dijo que durante su gobierno el grito de auxilio de médicos y enfermeras se escuchará tanto en el edificio de la Caja, como en Zapote, “espero que podamos ver a la Caja moviéndose con mayor rapidez y creo que lo estamos logrando”, reiteró Solís.
EMERGENCIA NACIONAL
Para Mario Devandas, miembro de la junta directiva de la Caja, la pronta solución llegará con la declaratoria de “emergencia nacional”, en todos los servicios que afectan al asegurado quien demanda una mejor atención en ebais, clínicas y hospitales.
“No podemos postergar la solución, tenemos que elaborar una serie de medidas que permitan resolver el gran problema, por eso en la Junta algunos de sus miembros consideramos que declarar la situación como emergencia nacional es la solución, si lo hicieron con la Trocha por qué no con los servicios de la Caja”, señaló Devandas a DIARIO EXTRA.
Sobre la declaratoria por parte del Gobierno, el presidente Solís dijo que están haciendo los esfuerzos y que continuará con el trabajo que se ha estructurado para procurar la solución.
Por su parte, Devandas indicó que cuentan con el apoyo de algunos diputados y que trabajan para lograr otros apoyos en el Poder Legislativo y así lograr que se apruebe su propuesta.
PARO EN HOSPITALES
El anuncio de los trabajadores del Hospital San Juan de Dios, que irán a paro la próxima semana y la amenaza de los funcionarios de otros centros médicos de unirse al movimiento no lo acepta, ni mucho menos lo justifica el mandatario.
“Me parece que la mejor manera de resolver los problemas de la Caja no es parando los hospitales, yo creo que la forma de hacerlo es identificando los problemas y trabajando para resolverlos. Si se paran los hospitales los que salen afectados son los pacientes y los propios funcionarios de la Caja que dicen defender”.
Sobre la deuda por parte Estado de ¢780 mil millones a la Caja, afirmó Solís que hay una polémica sobre le monto, pero que el gobierno de hacer el pago para eliminar esa deuda porque es la de mayor y la que más vergüenza debería darnos, porque es el propio Estado el que se encuentra más moroso con la Caja.
Entre las preguntas y respuestas el Presidente Solís al final mostró su angustia y solidaridad con los asegurados, sin la promesa de una pronta solución, por eso la resignación sigue como compañera inseparable de los enfermos cuando busquen cura en algún servicio de la Caja.
