Por casi ¢70 mil por noche usted puede comer granos de hámster, correr en una rueda gigante y dormir en las pilas de heno en lo que se llama el “Hámster Villa”, un hotel en Francia para los que se creen ratas. Maud y Sébastien fueron los primeros en experimentar cómo viven los hámsters y las ratas, sin miedo ante la idea de dormir en heno o alimentarse del grano especial para hámster.
“Es una experiencia única, simplemente algo distinto”, afirmaron los huéspedes. “Convertirse en una rata, comer semillas, cambia nuestra forma de vida… salir de nuestra rutina diaria”, aseguraron.
Los propietarios Frederic Tabary y Yann Falquerho dirigen una empresa que alquila lugares inusuales y extraños.
“En el mundo de los niños, el hámster o la ratita es aquel animal tierno y pequeño. A menudo los adultos que vienen aquí han querido o han tenido hámsters o ratas blancas cuando eran pequeños”, dijo Falquerho, vestido como un hámster.
PERIODISTA: Redacción Diario Extra
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Lunes 11 Mayo, 2015
HORA: 12:00 AM