Orlando (EE.UU.), (EFE).- Los padres de Ibragim Todashev, el checheno muerto por los disparos de un agente del FBI durante un interrogatorio sobre su participación en el atentado con bomba del maratón de Boston (EE.UU.), buscan una indemnización de 30 millones de dólares.
Representantes del Consejo de Relaciones Islámico-Estadounidenses (CAIR) en Florida y de la familia Todashev hicieron el anuncio durante una conferencia de prensa efectuada en las afueras de la corte de Orange en Orlando.
En esta misma ciudad, en mayo de 2013 el joven Ibragim Todashev, de 28 años, fue abatido por siete balas, mientras era interrogado en su casa por el agente del FBI Aaron MacFarlane, en compañía de dos patrulleros de Massachusetts.
En el momento de su muerte, Todashev estaba siendo interrogado sobre su relación con Tamerlan y Dzokhar Tsarnaev, acusados del bombardeo ocurrido durante el maratón de Boston en abril del 2013, así como por su supuesta participación en un triple asesinato, aún sin resolver, ocurrido en septiembre del 2011 en la ciudad de Waltham, en el estado de Massachusetts y en el que estaría implicado junto a Tarmelan Tsarnaev.
"Estamos buscando respuestas y justicia para alguien que fue tiroteado en su propia casa siete veces por un agente del Buró Federal de Investigaciones, después de largas horas de interrogación", dijo Ali Kurnaz, coordinador de comunicaciones de CAIR.
Agregó en su explicación que su organización, que aboga por los derechos civiles y la libertad de religión, "aceptó el caso por la luz que arroja sobre las malas prácticas del FBI y las oportunidades que provee para abogar por una reforma".
En su intención de demanda, los padres de Todashev alegan en un documento de ocho páginas, que el FBI fue negligente al emplear, en 2008, a MacFarlane, un expolicía del Departamento de Policía de Oakland, en California, quien supuestamente arrastraba un pasado de acusaciones de brutalidad policial, de falsificación de reportes policiales y quien seguía recibiendo pagos por incapacidad laboral por parte de la Policía de Oakland al mismo tiempo que trabajaba como agente para el FBI.
"CAIR Florida está preocupado que se permita que agentes conduzcan interrogatorios potencialmente cargados en las residencias de las personas, en vez de (efectuarlos) en ambientes seguros", afirmó por su parte Thania Díaz Clevenger, directora de derechos civiles de CAIR Florida, en una declaración escrita enviada a Efe y acompañada por una copia del reclamo que enviaron al FBI y en el detallan los hechos ocurridos antes, durante y después del interrogatorio fatal.
Los padres de Todashev, quienes residen en Rusia, declararon en un escrito leído por representantes de CAIR durante la conferencia de prensa que esperan que el agente del FBI que mató a su hijo pronto sea considerado responsable.
"El asesinato de nuestro hijo es injusto y el resultado de los abusos de poder por parte del FBI", dijeron.
Esperamos que "el proceso que estamos empezando traiga justicia para nuestro hijo, nuestra familia y el mundo", agregaron los padres quien desearon que el caso sirva como un llamado a la atención pública sobre lo que a su juicio constituye "un abuso de poder, y violaciones de los derechos civiles por parte del FBI".
El documento de reclamo por los 30 millones de dólares fue enviado a las oficinas centrales del FBI en Washington DC, vía correo certificado, aseguraron los representantes de CAIR.
