Son 70 las familias beneficiadas con esta iniciativa. Vivienda Temporal es un proyecto financiado por el Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS) y pretende dar un techo digno a los residentes en las zonas más vulnerables de Costa Rica.
Según el ministro de Vivienda, Rosendo Pujol, este plan debe culminarse en febrero, mes límite para realizar el desalojo.
“Este es un primer esfuerzo de Vivienda Temporal que va a ser casi inevitable en un país comprometido a construir muchos proyectos de infraestructura, particularmente vial, y que tiene varias personas invadiendo terrenos que están dentro de esos proyectos y en algunos casos, vamos a tener que empezar a recurrir a este método”, dijo Pujol a DIARIO EXTRA.
En el caso de que se diera una sobrepoblación en estas casas, Rosendo es claro en que este tema le compete al gobierno de la República, quien es el que está dispuesto a defender el sistema legal costarricense.
Los desalojos deben efectuarse 15 días antes de que comiencen los trabajos.
