Un nuevo conflicto entre Costa Rica y Nicaragua podría estar a punto de estallar, debido a la insistencia de los pinoleros en inaugurar el 10 de mayo un nuevo paso fronterizo por la comunidad de Las Tablillas. Tan solo dos días después de que el nuevo gobierno tico tome las riendas del país.
Mario Zamora, ministro de seguridad pública, explicó que desde hace varias semanas, mediante nota diplomática emitida por la Cancillería, se le solicitó al país del norte trasladar la apertura hasta el segundo semestre del 2014, pero, al parecer, los nicaragüenses han hecho caso omiso de la misma.
“La apertura unilateral es un acto hostil, que pretende forzar a la nueva Administración a entablar una mesa de diálogo directo, que hasta ahora el Presidente electo ha declinado llevar a cabo. Esta medida de presión pretende sentar a Costa Rica en una mesa de negociación usando como excusa la apertura de la frontera en Tablillas por parte de Nicaragua”, dijo el Ministro. A pesar de que Costa Rica cuenta con los recursos, por medio de un préstamo del Banco de Interamericano de Desarrollo (BID) para montar la infraestructura necesaria y llevar a cabo la apertura del puesto, la realidad es que se ha avanzado poco para ello.
Lo que a criterio de algunos expertos en la materia, esto es simplemente una forma en la que el gobierno de turno estaría quitándose la responsabilidad de tener que negociar con la administración de Ortega, con la cual desde el problema con Calero, se han visto muy debilitadas las relaciones.
En donde el gobierno tico sí está poniendo gran parte de sus recursos es en la recuperación de unas instalaciones de Ministerio de Obras Públicas y Transportes que en este momento se encuentran abandonadas en Puerto Níspero, donde antes llegaba el ferry del Tempisque y para ello se está gestionando el traslado de los guardacostas y sea Seguridad Pública quien se encargue de reacondicionar el lugar y hacer en ese punto su nueva base, con el fin de atacar y controlar la pesca ilegal en el Golfo de Nicoya.
