Ayer arrancó el juicio contra Édgar Campos Portocarrero, el porteador acusado de violar a su compañera sentimental y dejar paralítica a su hijastra.
En la sala de juicio número 4 de los Tribunales de Heredia y después de 2 horas y media de retraso, pues hubo una sentencia previa en el mismo recinto, por fin se llevó a Campos a la silla de los acusados.
Previamente el Ministerio Público, representado por Bernal Rodríguez y Jorge Arturo Benavides, hicieron el relato de la acusación y la acción civil resarcitoria, donde se le acusa de 15 delitos: 1 por violación, 4 por abuso de la patria potestad en concurso ideal, 2 por amenaza, 8 por restricción a la autodeterminación (por miedo) y 1 por daño patrimonial (llevarse a la madre por la fuerza).
La demanda civil quedó fijada en ¢20 millones, pero podría aumentar el monto dada la parálisis de la hijastra Valentina.
Pese a que el desalmado se abstuvo de declarar, Jenny Rodríguez González rindió una extensa declaración e indicó cómo Campos bajo amenazas de muerte siempre las obligaba a ella y su hija a cumplir su voluntad.
Descabezó A POLLITO
La mujer relató que una vez, antes de que él estrellara a su hija contra la pared de la casa, provocándole la parálisis de sus miembros inferiores y superiores, ella le regaló un pollito a la niña, pero el monstruo lo tomó y frente a la menor le arrancó la cabeza, adivirtiéndole que si seguía contando las cosas que pasaban en la casa le haría lo mismo que al pollo.
Pero eso no fue todo. La noche del 15 de mayo de 2013 Campos llegó borracho y muy alterado, según consta en la denuncia de la cual DIARIO EXTRA tiene copia, le exigió a Rodríguez meter a Valentina al cuarto, obligándola a mantener relaciones sexuales.
La mujer accedió porque él le dijo que si no lo hacía mataba a su hija y a su madre, además qué tenía amigos que harían el trabajo por él, de ahí que no iba a ensuciarse las manos. Ayer la niña llegó en una silla de ruedas que consiguió su padre biológico Juan Ricardo Palacios, quién ahora pretende quedarse con la patria potestad de la menor luego de ver todo lo que ocurría enfrente de la madre y que esta nunca denunció, al punto que hoy su hija está paralítica.
"Mire, yo lo unicó que quiero es que se haga justicia. Mi hija está en esa silla de ruedas por el daño provocado por ese sujeto y la madre aguantó todo, sin importarle lo que le hacían a la niña", declaró Palacios, quien está como querellante en la causa.
Benevides dijo que tienen 6 testigos que podrán demostrar las atrocidades que cometía Campos, todas bajo amenazas de muerte a la madre de Valentina, doblengando su voluntad y la de la hija.
PERIODISTA: Alexander Méndez
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Martes 10 Diciembre, 2013
HORA: 12:00 AM
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